Los servicios y prestaciones que entrega el IESS se facilitan cuando los pensionistas cumplen con los requisitos solicitados por el Seguro de Pensiones de la institución, que las leyes y normas exigen. Para ello es importante tomar en cuenta ciertas recomendaciones que hace el IESS para brindar una mejor atención.

Cambio de cuenta bancaria: el pensionista que decide cambiar su cuenta bancaria está obligado a informar al IESS, como máximo, en los primeros cinco días del mes. De esa manera se garantiza el depósito oportuno de la pensión en la nueva cuenta individual, el 20 de cada mes.

El único requisito para registrar la nueva cuenta bancaria es la certificación conferida por el banco, en la que conste que el pensionista o beneficiario de montepío es el titular.

Carné de jubilado o pensionista: En caso de pérdida del carné de jubilado, este debe acercarse con una fotografía actualizada a la respectiva Unidad Provincial de Pensiones del IESS (Centros de Atención Universal), que están en todo el país, para obtener la nueva credencial.

Es importante que el pensionista porte siempre su carné para acceder a las diferentes prestaciones y servicios, tales como salud y préstamos.

Aviso de fallecimiento de un pensionista: se debe tomar en cuenta la importancia de la notificación inmediata al IESS del fallecimiento de un jubilado o beneficiario de montepío. De esta manera se agiliza el trámite para la entrega del auxilio de funerales y la pensión de montepío, en el caso de la muerte de un afiliado activo o pensionista.

Rol de pensión mensual: se puede obtener este documento a través de su correo electrónico. Para ello es necesario que ingrese sus datos en la página web www.iess.gob.ec, en el link: https://www.iess.gob.ec/afiliado-web/pages/principal.jsf. Para obtener el documento físico debe acercarse a los centros de atención universal más cercana a su domicilio, del 15 al 20 de cada mes con la presentación de la cédula de ciudadanía.

El Sistema de Pensiones del IESS administra de manera eficiente los fondos de los jubilados para mejorar su calidad de vida, de acuerdo con los objetivos del Plan del Buen Vivir de la Revolución Ciudadana, y como parte de su política de servicio a un grupo vulnerable de la sociedad como son los pensionistas y beneficiarios de montepío.