Únicamente con autorización expresa del respectivo director provincial del IESS, sustentada en informe técnico de la Dirección del Seguro de Pensiones, los jubilados por invalidez pueden volver a trabajar y por tanto reingresar al Seguro General Obligatorio.

Para la autorización, el interesado tiene que enviar una carta al director general o director provincial del IESS señalando el tipo de trabajo que realizaría y luego de los resultados del examen médico en una de las unidades del Seguro Social, obtiene la correspondiente autorización.

Los asegurados se deben someter a los exámenes médicos que el IESS estime convenientes y a los tratamientos que se les prescriba. El incumplimiento de este requisito causa el archivo del trámite o la suspensión de la pensión, según el caso.

Es importante anotar que la jubilación por invalidez que desde hace años concede el IESS a través del Seguro de Pensiones, es diferente a la jubilación por discapacidad dispuesta por la Ley Orgánica de Discapacidades que tiene diferentes requisitos y condiciones, y que también la administra el Seguro de Pensiones del IESS desde este año 2014.

Jubilación por invalidez del IESS

El afiliado que solicitó la jubilación por invalidez debe registrar por lo menos cinco años de aportes al IESS y someterse a los exámenes médicos en las unidades médicas de la institución. Una vez que la Comisión Valuadora aprueba la jubilación, el afiliado presenta la renuncia para que su empleador registre el aviso de salida; con todos los requisitos el afiliado solicita la jubilación definitiva a través del portal web de IESS.

Las pensiones mínimas y máximas de invalidez, vigentes en el año 2014, se establecen de acuerdo con el tiempo de aportación, en proporción al salario básico unificado mínimo del trabajador en general. La pensión mínima para estos jubilados está entre 170 y 340,99 dólares, dependiendo de los años de aportación; y la máxima es de 1.530 dólares.