Portoviejo, 22 de marzo de 2019

Boletín de Prensa No.287

En los Hospitales Generales Manta y Portoviejo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, IESS, en la provincia de Manabí, se conmemoró el Día Mundial de la Tuberculosis, con el desarrollo de charlas informativas y casas abiertas, donde se expuso medidas de prevención, alimentación adecuada, cuidados y consecuencias de esta grave enfermedad. 

 

El Día Mundial de la Tuberculosis es un día para educar al público sobre el impacto que tiene esta patología en todo el mundo, manifestaron los médicos durante la jornada, con la asistencia de asegurados y ciudadanía en general.

 

"Junto con nuestros afiliados y colegas en todo el mundo, compartimos los éxitos logrados en la prevención y el control de la tuberculosis, y creamos conciencia sobre los problemas que impiden que avancemos hacia la eliminación de esta enfermedad devastadora", acotó la Dra. Roxana Palma, epidemiologa del Hospital Portoviejo. 

 

En esta unidad hospitalaria, en 2018, se recibió a ocho pacientes con tuberculosis; y en lo que va de este año, se ha diagnosticado a tres personas con esta enfermedad. 

 

En el Hospital de Portoviejo, una vez diagnosticados, los pacientes son reportados al Ministerio de Salud Pública, donde continúan con el tratamiento correspondiente. 

 

El tratamiento oportuno es crucial, para controlar y eliminar a tiempo esta afección "Tenemos un rol fundamental como hospital para ayudar a los pacientes que presenten dicho cuadro" expresó Palma. 

 

La tuberculosis conocida por sus siglas (TB) es una infección bacteriana causada por un germen llamado Mycobacterium tuberculosis. La bacteria suele atacar los pulmones, pero puede también dañar otras partes del cuerpo. Es transmisible de persona a persona, a través del aire. Cuando un enfermo de tuberculosis pulmonar tose, estornuda o escupe, expulsa la bacteria denominada bacilos tuberculosos. Basta con que una persona inhale unos pocos bacilos para quedar infectada.

 

Jaime S. perdió a su padre, por causa de la tuberculosis. "Es una enfermedad que desmejora poco a poco la calidad de vida de quien la contrae, pero que aún así, si se toman las precauciones necesarias y se toma la medicación indicada y en el tiempo indicado llegan a su cura", declaró Sánchez. 

Los síntomas de una personas con tuberculosis son: tos, fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso rápida, decaimiento, debilidad total del cuerpo; en los primeros meses estos síntomas son leves, lo que retarda su diagnóstico.  

 

"Como resultado de ello, los pacientes tardan en buscar atención médica y transmiten la bacteria a otras personas" anotó la doctora Damelis Marcilli, durante una de las charlas.  A lo largo de un año, un enfermo tuberculoso puede infectar a unas 10 a 15 personas, por contacto estrecho. Si no reciben el tratamiento adecuado, hasta dos terceras partes de los enfermos tuberculosos mueren.