Ambato, 12 de marzo de 2021

La dirección provincial del IESS Tungurahua conmemoró esta mañana la sesión solemne por sus 93 años de aniversario.  En el evento estuvieron presentes las principales autoridades de la provincia y sus delegados, el acto tuvo lugar en el auditorio del Hospital General IESS Ambato.

Por su parte, el Mgs. Felipe Guevara, director provincial, centró su discurso en el reconocimiento a los médicos de primera línea que han trabajado muy arduamente durante toda la pandemia, enfatizó en el esfuerzo que han realizado y siguen realizando todo el personal de salud, principalmente el personal de primera línea.

El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social recordó sus primeras experiencias sirviendo a la ciudadanía tungurahuense y sus inicios a nivel nacional.

Susana Rodríguez, directora médica del hospital, fue la encargada de compartir una reseña histórica: "La historia cuenta, que el primer dispensario en Ambato fue abierto en 1.931 en la calle Cuenca entre Mera y Montalvo. Esta unidad de salud funcionó durante 61 años antes de cambiarse a Atocha. El dispensario contaba con cuatro médicos y siete personas entre enfermería, limpieza y conserjes. En 1.986 se inició la construcción del nuevo hospital y el traslado se cumplió en su totalidad en 1.999. Mediante disposición presidencial en el año 2.012 se ocuparon los siete pisos de la actual edificación".

Por otro lado, el Ing. Santiago Apunte, director administrativo del hospital mencionó: "Aún tenemos muchos retos por delante, entre ellos lograr una vacunación masiva que permita una reactivación económica adecuada, seguir construyendo un ecosistema de seguridad social universal, mejorar y ampliar servicios para la ciudadanía".

La parte más emotiva del evento estuvo a cargo del Dr. Mario López, Coordinador de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), quien dio el testimonio de su labor con los pacientes covid-19, dijo: "Todos pensamos en nuestros seres queridos y como hacer el menor daño posible ante lo inevitable; nuestras enfermeras y fisioterapistas, mis jóvenes guerreros residentes así como la experiencia de mis amigos tratantes, todos unidos en una sola fuerza de batalla, por fuera indestructibles, pero por dentro temerosos. Puedo ver en ellos la angustia, la desesperación, una lágrima, pero también la sabiduría, la fortaleza que propagan. ¡Es hora de enfrentar nuestro destino!".

Durante el evento también se entregaron reconocimientos a las instituciones públicas que colaboraron y que continúan apoyando al IESS Tungurahua en la lucha contra el covid-19.

Finalmente, el personal de salud del IESS, que labora en la provincia de Tungurahua también recibió un reconocimiento.