En abril pasado, Mariela Guanuchi, de 26 años de edad, se sometió a una operación de corazón abierto en el Hospital del IESS José Carrasco Arteaga, de Cuenca. A casi un mes de la intervención siente que su recuperación se consolida y ahora piensa en retomar próximamente sus actividades normales.

Mariela es oriunda de Oña y está radicada en Cuenca. Es casada y tiene un niño de 7 años. Su vida prácticamente cambió en cuestión de semanas. "Cuando me enteré de que padecía una malformación del corazón pensé que me iba a morir, pero nunca me imaginé que mis aportaciones al seguro, que a veces pueden resultar molestosas, me salvaran la vida".

La paciente comenzó a sentir dolores toráxicos punzantes hace 3 años, acompañados de cansancio. Hace tres meses acudió al IESS para un chequeo y tras realizarse varios exámenes los médicos cardiólogos decidieron que la operarían. Fue así que a finales de abril se realizó con éxito la cirugía.

Tras la intervención permaneció ocho días internada en el hospital, tiempo que recuerda con agradecimiento pues la atención fue muy buena, afirma. "Los médicos y enfermeras estaban todo el tiempo en mi habitación, no me dejaron sola", agrega.

La operación que se le practicó a Mariela Guanuchi fue de alta complejidad y es de las primeras que se ehecuta en el Hospital del IESS de Cuenca, gracias a un buen equipamiento, tecnología de punta y profesionales muy capacitados.

Ahora, Mariela ya piensa en volver al trabajo y retomar sus actividades cotidianas. Ella se dedica al arte de la joyería desde un tiempo atrás y, según la opinión del cirujano que lleva su control, tras una cirugía del corazón exitosa como esta no existe impedimento alguno para llevar una vida normal.